Siendo uno de los animales cuyo coste de producción es muy bajo, la cabra doméstica no necesita demasiado espacio para vivir y se suele criar con escasez de pastos. Se adapta perfectamente a cualquier condición, y con una correcta alimentación, y si s con el pienso ecológico cabras, mucho mejor, esta gozará de gran salud. Las encontramos en casi todos los países del mundo, especialmente en Asia, África y en otras zonas en vías de desarrollo, teniendo una función social importante en las clases de renta baja.
H ace casi 10.000 años que el ser humano consume los productos que de ella se obtienen, puesto que la cabra fue uno de los primeros animales domesticados por el hombre, debido a su fácil manejo, junto con la vaca, el cerdo y la oveja.
¿De que se alimenta la cabra doméstica?
Como animal rumiante, el alimento natural es el pasto, es decir, la hierba, las leguminosas, los arbustos e incluso las cortezas, hojas y ramas bajas de árboles. Gracias a esta versatilidad en su alimentación el ser humano pudo domesticarla fácilmente y con rapidez.
Si lo que se busca es que tengan una buena salud, se le puede dar suplemento diario de proteínas, grasa, fibra, sales minerales y vitaminas que se aporta con el pienso, y si está estabulada y no pude pastar, debe poder acceder libremente a paja o forraje como heno de gramíneas. Si se le ofrece la mejor alimentación, la cabra doméstica conseguirá un alto nivel de bienestar.
Nuestro pienso ecológico cabras es la opción ideal para que cabritos y cabras tengan cubiertos todos sus requisitos nutricionales, asegurando así la base de su salud. Nuestro programa de pienso ecológico está pensado para adaptar la composición de este alimento a sus necesidades según cada etapa productiva del animal (gestación/recría, lactación y crecimiento), logrando así la adecuada nutrición de estos animales, con el máximo aprovechamiento del pienso y ahorrando en su coste.
Lo bueno de la cría de cabras
Tener cabras supone muchos beneficios, ya que sin requerir de grandes inversiones, se obtien carne y leche, que se ha demostrado ser más digestible que la de la vaca, con la que también se elaboran apreciados quesos y mantequilla.
En comparación con la de vaca, la leche de cabra tiene casi la misma cantidad de proteínas, grasa, hierro, vitamina C y D, superando a esta en cantidad de vitaminas A y B, y un contenido menor de lactosa, produciendo 1,3 kg de leche al día, una cantidad más que razonable. Además, su estiércol se puede aprovechar como abono e incluso en varias culturas, la cabra se utiliza como animal de tracción.
Podemos encontrar alrededor de 60 razas de cabras siendo todas fáciles de criar y tener una alta fertilidad, ya que tras un periodo de gestación de 5 meses, nacen de 2 a 3 crías por parto.